martes, 27 de enero de 2009

Remordimiento.

...Entonces sonaba la Radio, el silencio se apoderaba de mi cabeza,
y fue en aquel segundo, cuando decidí que recordar mirarte era mejor que el silencio en su esencia.
No sabías que cada paso tuyo
era un acercamiento a la más pasajera película que puede existir.
Las miradas lograron enterrar mi calma.
Cada paso mío, se ganaba la indiferencia de tu ser.
Los granos de arena se movían con el viento, tu cabello lograba distraer mi día (en mi mente).
Entonces, cuando se acaba el tiempo, me logré dar cuanta... no te pude tocar con mi voz, no logré decirte...
Procuré no entrar en el Pasado,
Sigo con la radio, sintonizo el Remordimiento (de lejos).

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